La Intendenta Lucía Pinto adelantó que se estima reforzar las fiscalizaciones respecto al distanciamiento social, el uso de mascarillas, entre otras acciones.
La autoridad regional señaló que ante la llegada de un nuevo fin de semana largo –por el Día del Trabajador- se está trabajando en un plan de contingencia que permita potenciar la estrategia de contención del coronavirus.
Al respecto dijo que “tenemos próximo un fin de semana largo en el que esperamos que las personas sigan siendo responsables y tomen las precauciones para evitar el contagio de COVID-19. Si bien hasta ahora nuestra región mantiene el número de casos y la curva de contagios, y hemos podido dar atención a cada uno de los pacientes, esto no implica que estemos libres del virus y que no se puedan contagiar personas de los grupos vulnerables, incluso provocándole la muerte, por eso vamos a dar a conocer dentro de los próximos días el plan que se está preparando para el próximo fin de semana largo”.
Ante ello, sostuvo la Intendenta Pinto, se coordinará un refuerzo de las fiscalizaciones para el distanciamiento social, uso de mascarillas, controles diurnos y en toque de queda y aduana sanitaria.
Precisamente, en la barrera de Pichidangui, el último balance indicó que fueron controlados 2.767 vehículos hasta la medianoche del jueves 24 de abril, de los que 64 fueron devueltos por no contar con su carnet sanitario o no justificar el motivo de traslado a la región.
El Jefe de la Defensa Regional, General Pablo Onetto, detalló que “las Fuerzas Armadas, junto con las policías realizamos entre aduanas sanitarias, aduanas de aeropuerto, control de toque de queda y control a la entrada a Illapel un total de 12.018 controles a personas y a 5.287 vehículos. Lamentablemente tuvimos 68 retenidos en toque de queda y hemos detectado nuevamente un mal uso del salvoconducto, de estas personas algunas quedaron retenidas porque su documento no se relacionaba con el motivo de autorización”.
